FORMULA D: CIRCUITO 6, AUSTIN – NEVADA

Brillantes rayos de sol se reflejan sobre las aguas del Mediterráneo recortando la figura de llamativos casinos y suntuosos yates o lanchas rápidas. Formula D te transporta al puerto deportivo de Mónaco. Un rugido repentino ensordece las calles, los gritos de miles de espectadores ahogados por el bramido de los motores de alto octanaje.

Siéntete dentro de un auténtico Fórmula 1 y compite a más de 200 kilómetros por hora. En el mundo del motor, y en Formula D, ser un conductor habilidoso es solo la mitad de la victoria.

Necesitas tener detrás a uno de los fabricantes de automóviles más prestigiosos del mundo para construir con mimo y tiempo un coche que destaque en velocidad, manejo y durabilidad. Puedes elegir un coche estándar o construir el tuyo propio eligiendo cuántos puntos asignas a neumáticos, caja de cambios, frenos, carrocería, motor y conducción y así hacer que funcione exactamente como quieres. Y si durante la carrera algo falla, nada como una rápida parada en boxes para solucionarlo. Una vez que ya tienes tu coche listo, Formula D te ofrece distintos modos de juego.

Puedes elegir tomar parte en una divertida carrera de Fórmula 1 y sentirte un piloto más quemando asfalto en el mítico circuito de Mónaco. O quizá buscas una experiencia de carrera más sencilla, una travesía por el corazón de la ciudad. Las sencillas e intuitivas reglas del juego te permiten esto y mucho más.

La elección del piloto en Formula D es otro de los aspectos clave para salir victorioso de las carreras, cada uno tiene una personalidad única que puedes poner a tu servicio para ganar. Diane Montfort, por ejemplo, es famosa por sus rápidos reflejos y por ser infalible en las salidas. Siempre pasa por delante primero si está empatada con otro conductor en una posición.

Jack Owens, por su parte, es un experto en apurar la frenada en las curvas y Derek Manson es un conductor agresivo dispuesto a asumir grandes riesgos con tal de adelantar. Así hasta diez pilotos, por lo que no te será difícil encontrar al que más se ajuste a tu estilo de conducción.

Y si conducir por el circuito de Mónaco ya te parece difícil, prepárate para los retos en carretera de Formula D. Algunas zonas del asfalto están en mal estado, lo que puede ocasionar daños en tu coche y retrasarte. O incluso dejarte fuera del trazado.

En la carretera no hay reglas, tan solo estáis los pilotos unos contra otros y solo el más rápido se alzará con la victoria. Así es Formula D, un juego que te coloca en el papel de un experimentado piloto que debe decidir desde cómo configura su coche hasta qué riesgo asumir en una loca carrera callejera.